lunes, 9 de septiembre de 2013

Capítulo XVIII Verso 48

A todo esfuerzo lo cubre algún tipo de defecto, tal como al fuego lo cubre el humo. Por consiguiente, uno no debe abandonar el trabajo que nace de su naturaleza, ¡oh, hijo de Kunti!, ni siquiera si el mismo está plagado de defectos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario