jueves, 21 de mayo de 2015

Capítulo 15 - Verso 8



La entidad viviente que se halla en el mundo material lleva de un cuerpo a otro sus diferentes concepciones de la vida, tal como el aire transporta los aromas. Así pues, ella adopta un tipo de cuerpo, y de nuevo lo deja para adoptar otro.

SIGNIFICADO
Aquí se describe a la entidad viviente como isvara, la controladora de su propio cuerpo. Si ella quiere, puede cambiar su cuerpo por uno de un grado superior, y si quiere, puede desplazarse hacia una clase inferior. Existe una diminuta independencia. El cambio de cuerpo del que es objeto depende de ella. A la hora de la muerte, la conciencia que ella ha creado la llevará al siguiente tipo de cuerpo. Si ella ha vuelto su conciencia como la de un perro o la de un gato, es seguro que se trasladará al cuerpo de un perro o de un gato. Y si ha fijado su conciencia en las cualidades divinas, se trasladará a la forma de un semidiós. Y si tiene conciencia de Krsna, será trasladada a Krsnaloka, en el cielo espiritual, y se reunirá con Krsna. Es una falsa pretensión creer que después de la aniquilación de este cuerpo todo se acaba. El alma individual transmigra de un cuerpo a otro, y su cuerpo actual y sus actividades actuales son el trasfondo de su siguiente cuerpo. Uno recibe un cuerpo diferente conforme al karma, y tiene que abandonarlo a su debido tiempo. Aquí se afirma que el cuerpo sutil, que transporta la concepción del siguiente cuerpo, manifiesta otro cuerpo en la siguiente vida. Este proceso de transmigrar de un cuerpo a otro y luchar mientras se está en el cuerpo se denomina karsati, o la lucha por la existencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario